jueves, 2 de febrero de 2012

Qué se puede esperar de un ministro de educación mentiroso?

Qué diferentes van a ser el ministro Gabilondo y éste que han puesto los mercados. Quiero referirme al cambio de Educación para la Ciudadanía por este invento nuevo, heredero de la educación fascista.

Miente al decir que adoctrina, poniendo de ejemplo un libro que no es de texto. Igual podríamos decir los laicistas de ese libro que les gustaría imponernos llamado Biblia, donde se incita a cometer graves delitos y otras barbaridades.

Dicen que adoctrinar, por que habla de sexualidad actual, de igualdad, de respeto y paz. Pero quieren imponernos que la Constitución actual es sacrosanta, la única y verdadera, la que ha solucionado y solucionar todos los problemas de nuestra sociedad. Pero, hay millones de ciudadanos, demócratas y libres, que no queremos esta constitución, que no refleja nuestras ideas, porque está hecha desde el miedo, para no despertar a los fantasmas, y que los ancestrales amos sigan siéndolo.

¿Qué es más dogmático, enseñar valores recogidos en la Declaración de Derechos Humanos o una ley de una predemocracia de hace más de 30 años en una sociedad distinta a la actual, y a la que tenemos que acatar como todopoderosa, inviolable e inmutable? A mi me suena a la ley de Moisés, y eso es doctrina, es dogma.

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